1 de abril de 2013

White lips.

El tiempo va muy lento y muy rápido a la vez. Quiero dormir y no volverme a despertar. Soy un puzzle roto sin terminar, me faltan piezas y no sé donde buscar. Montaña rusa como estado de ánimo, tantas subidas y bajadas que ya no sé ni dónde estoy. ¿Qué ya no me importa nada más? Puede ser. Solo dime donde acaba esto, ¿dónde está la salida? Está todo muy oscuro. Esto es lo que pasa cuando se acaba el tiempo, cuando llegas demasiado tarde y no puedes hacer nada. Impotencia al saber que no va a cambiar. Y es en ese momento, en el que me siento tan vulnerble, pequeña y perdida al mismo tiempo cuando no aguanto más y me echo a llorar, quizás deseando que todo esto acabe ya.


No hay comentarios:

Publicar un comentario